América de Cali buscó un golpe de autoridad para su banquillo y Ricardo Gareca estuvo en carpeta. El técnico argentino, de amplia trayectoria en Sudamérica, reconoció que hubo conversaciones, pero aclaró que no podía asumir por compromisos personales en Argentina.
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En diálogo con el periodista Carlos Arturo ‘El Petiso’ Arango, Gareca explicó: “Por este año tengo compromisos personales y se me complica moverme de Argentina, el próximo año no tendría problemas”. Con esa frase, despejó cualquier duda sobre las razones que lo alejaron del cuadro escarlata.
De acuerdo con versiones cercanas al club, todo parecía definido para que Gareca tomara las riendas antes de la llegada de David González. Incluso se habló de un acuerdo avanzado, pero a última hora el entrenador decidió no firmar.
La noticia generó sorpresa en la hinchada americana, que aún recuerda su exitoso paso como jugador en la década de los 80. Muchos soñaban con verlo dirigir al equipo y darle un nuevo impulso en lo deportivo, especialmente después de un semestre irregular.
América, finalmente, apostó por González, quien ya asumió el reto de devolverle protagonismo a la institución. Sin embargo, el interés por Gareca no pasó desapercibido. Su nombre quedó en el radar para el futuro, y el propio entrenador dejó la puerta abierta para 2026, cuando sus compromisos familiares y personales ya no interfieran con un proyecto internacional.
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