América de Cali encara una semana decisiva. Este martes 12 de agosto, recibirá a Fluminense en el Pascual Guerrero, en el duelo de ida por los octavos de final de la Copa Sudamericana. Sin embargo, la situación física del equipo genera inquietud: cinco jugadores que estaban en los planes del técnico Diego Raimondi encendieron las alarmas.
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La preocupación mayor recae sobre Dylan Borrero, quien sufrió una lesión muscular de aductores tras el duelo frente a Tigres en la Copa BetPlay. El parte médico oficial lo descartó para el choque contra Fluminense. Su infortunio la semana anterior ya había provocado críticas al cuerpo técnico por exponerlo en un partido con la clasificación prácticamente asegurada.
Mientras tanto, Jhon Murillo, Mateo Castillo y Éder Álvarez Balanta evolucionan favorablemente con trabajos de reacondicionamiento y podrían estar disponibles para el entrenador. En cambio, Jan Lucumí sufre una contusión en la rodilla derecha, no se ha entrenado y parece que definitivamente será baja contra los brasileños.
Este escenario obliga a América a buscar alternativas en su nómina y agilizar recuperaciones, justo antes de enfrentar a un rival potente como Fluminense. El conjunto brasileño, vigente campeón de la Copa Libertadores, llega con una plantilla repleta de figuras y con la etiqueta de favorito en la llave.
El partido arrancará a las 19:30 (hora colombiana) y será transmitido por televisión y plataformas digitales oficiales. La afición escarlata espera que el equipo responda a la altura, pese a las ausencias, y logre un resultado que le permita soñar con la clasificación en el partido de vuelta en Río de Janeiro.
América de Cali afronta este reto con presión, pero también con la ilusión intacta de seguir haciendo historia en el ámbito internacional.
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