Altafulla se llevó el premio mayor en La Casa de los Famosos Colombia 2025. Con el 51,8 % de los votos, el barranquillero se convirtió en el nuevo ídolo de la televisión nacional. Y se habría llevado, adicionalmente, los focos fuera del Junior en curramba.
Su victoria emocionó a sus fanáticos y generó celebraciones masivas. Sin embargo, en Barranquilla, muchos señalan que su triunfo también coincidió con otro evento clave: la silenciosa salida de Santiago Mele del Junior.
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Mientras los medios hablaban del reality, Junior perdió a uno de sus jugadores más importantes. Mele, arquero uruguayo y figura del equipo, dejó el club sin mayor revuelo mediático. La noticia pasó casi desapercibida, ni ruedas de prensa ni comunicados amplios, solo una breve confirmación del fin del vínculo.
La victoria de Altafulla llegó justo en ese momento. Barranquilla se volcó a apoyar a su artista y los reflectores ignoraron el movimiento en el equipo rojiblanco.
Algunos analistas deportivos y seguidores del club no pasaron por alto la coincidencia. En redes sociales comenzaron a circular comentarios que sugerían una estrategia para desviar la atención del entorno deportivo.
El caso Mele no tuvo la cobertura que normalmente genera una salida de ese nivel. Y eso, en Barranquilla, no es normal. Las cámaras, los titulares y los espacios radiales prefirieron enfocarse en el fenómeno Altafulla. Incluso medios deportivos dedicaron minutos al reality en lugar del análisis futbolero habitual.
Aunque no hay pruebas de una cortina de humo intencional, la coincidencia quedó marcada. Altafulla brilló. Junior perdió a su arquero estrella. Y la ciudad, por unos días, solo habló de televisión.
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