La sangrienta batalla campal que afectó a Nacional, Santa Fe y Millonarios

El hecho ocurrió en el año 200

Fotos: Dimayor

Para el año 2000, Soacha intentó celebrar sus 400 años de fundación con un hexagonal de lujo. Santa Fe, Millonarios, Nacional, Deportivo Cali, Deportes Tolima y el local Soacha Fútbol Club se citaron en el Torneo Porvenir, un campeonato amistoso de preparación para aquella temporada.

La idea era vivir una fiesta deportiva, pero terminó siendo recordada como el torneo de pretemporada más violento del fútbol colombiano. Todos los partidos se disputaron en el Estadio Luis Carlos Galán del Municipio.

La batalla campal se fue armando a medida que transcurría el torneo

El domingo 16 de enero del 2000 se jugó la primera fecha. Más de 12.000 personas disfrutaron de una jornada sin incidentes: Cali venció 2-1 a Soacha y Tolima goleó 4-1 a Millonarios.

Sin embargo, el domingo 23 de enero comenzaron las tensiones. Tras el triunfo 1-0 de Santa Fe sobre Cali y la victoria 2-1 del Tolima ante Nacional, hinchas cardenales y verdolagas protagonizaron las primeras peleas en las afueras del estadio.

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La situación se desbordó el domingo 30 de enero. Mientras Santa Fe derrotaba a Soacha, los Comandos Azules ingresaron al estadio y se enfrentaron con la Guardia Albirroja. Ambas hinchadas generaron disturbios en las tribunas e invasión de cancha.

Luego, en el duelo entre Millonarios y Nacional, cayeron objetos desde las tribunas contra los jugadores verdolagas, lo que obligó al técnico Santiago Escobar a retirar a Miguel Calero por seguridad.

La salida de las hinchadas desencadenó lo peor: una batalla campal en las calles de Soacha. Millonarios, Santa Fe y Nacional se enfrentaron entre sí, dejando decenas de heridos, daños a locales, vehículos destruidos y más de treinta detenidos.

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El lunes 31 de enero, la Alcaldía de Soacha convocó un consejo de seguridad junto al comandante de la Policía de Cundinamarca y otras autoridades para que el domingo 6 de febrero se pudiera jugar la final.

En el duelo definitivo, Santa Fe y Tolima empataron 1-1, y los pijaos se terminaron coronando campeones del torneo por penales.

La violencia, sin embargo, ya había marcado para siempre la memoria del fútbol colombiano y afectó a tres de los equipos más grandes del país: Nacional, Santa Fe y Millonarios.

eldeportivo.com.co

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