Atlético Nacional se juega la vida este martes en la Copa Libertadores. El equipo de Javier Gandolfi viajó a Brasil con una nómina de 24 futbolistas para enfrentar a Sao Paulo en el estadio Morumbí, a partir de las 7:30 p.m. (hora Colombia). Tras el empate sin goles en Medellín, los verdolagas necesitan un triunfo que les dé el pase directo a los cuartos de final y evite una definición angustiosa por penales.
La gran noticia para la hinchada es la presencia de Marino Hinestroza. El atacante caleño, que venía con molestias físicas, recibió el alta médica y ya se encuentra a disposición del cuerpo técnico. Su velocidad y desequilibrio por las bandas lo convierten en un hombre clave para romper la defensa paulista. También regresa Facundo Batista, delantero uruguayo que dejó atrás sus problemas musculares y apunta a sumar minutos en este partido de alta tensión.
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No todo fue positivo para Gandolfi. César Haydar, flamante refuerzo ‘verdolaga’, sufrió una lesión del bíceps femoral ante Fortaleza y se pierde el juego. Lo mismo ocurre con Billy Arce, que continúa en el departamento médico por una fatiga muscular. Dos bajas sensibles para un equipo que necesita alternativas ofensivas y experiencia en el campo.
El rival llega con confianza tras avanzar a esta instancia dejando en el camino a rivales históricos, y con el peso del Morumbí, un estadio que suele ser fortaleza para los brasileños. Nacional, sin embargo, apelará a su historia copera y a la experiencia de jugadores como Jhon Duque, Jefferson Duque y Dorlan Pabón para buscar la hazaña.
La serie está abierta. En Brasil se definirá si Nacional mantiene vivo el sueño continental o si se despide prematuramente de la Libertadores. La respuesta, este martes, en el templo paulista.
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