En 2025, Luis Enrique firmó el año más brillante de su carrera como entrenador. El técnico español transformó al Paris Saint-Germain en una máquina competitiva, con identidad clara, control emocional y una presión alta que sostuvo resultados durante toda la temporada.
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El gran golpe llegó en Europa. PSG ganó su primera Champions League con una final inolvidable y selló el triplete: Ligue 1, Copa de Francia y Champions. Luis Enrique gestionó una plantilla joven, equilibró talento y sacrificio, y sostuvo la ambición en los partidos decisivos.
El 2025 no terminó ahí. PSG sumó el Trophée des Champions, la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental. Con esos seis títulos, Luis Enrique completó el sextete y entró en la historia grande del fútbol mundial, un logro reservado para muy pocos entrenadores.
Ese registro lo convirtió en el tercer DT de la historia en lograr un sextete, después de Pep Guardiola con Barcelona en 2009 y Hansi Flick con Bayern Múnich en 2020. La comparación lo ubica en la élite absoluta del banquillo.
Además, Luis Enrique alcanzó otro hito mayor. Se convirtió en el segundo entrenador que logra dos tripletes. El primero llegó con Barcelona en 2015; el segundo, una década después, con PSG, en contextos y proyectos muy distintos.
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Resultados, método y liderazgo explican su elección como El Mejor Técnico del 2025. Luis Enrique no solo ganó títulos. Construyó un equipo dominante, reconocible y campeón en todos los frentes. Un año total, de esos que marcan época.
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