Tal como se preveía, Max Verstappen se quedó con el triunfo del Gran Premio de Estados Unidos, este domingo en Texas.
El neerlandés no la tuvo nada fácil, a pesar de las penalizaciones antes de la carrera de hombres como Charles Leclerc y Sergio Pérez.
Una mala parada en los pits obligó al vigente campeón del mundo a sacar a relucir su chapa, en una carrera que era tranquila hasta ese momento.
Producto de ello tuvo que luchar en las últimas vueltas contra un viejo conocido, Lewis Hamiton (Mercedes), quien acabó segundo.
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El RB18 fue implacable, logró descontar el tiempo necesario y le aseguró el título del mundial de constructores a Red Bull.
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Así fue como los austriacos aseguraron la ‘moñona’, teniendo en cuenta que ganaron de forma anticipada la general de pilotos y la de equipos.
La marca de bebidas energizantes dominó de principio a fin la temporada y con tres carreras por delante, solo buscará un mejor puesto para ‘Checo’ Pérez.
El mexicano se pudo recupera de una penalización y cruzó la meta en el cuarto lugar, detrás de Leclerc, quien completó el podio en Estados Unidos junto a Max Verstappen y Hamilton.
La gran decepción fue Carlos Sainz (Ferrari), quien a pesar de partir desde la ‘pole position’ se tuvo que retirar, tras ser impactado por George Russel.
En la primera curva el británico se pasó de línea, golpeó en un costado al español y le arruinó por completo la carrera.
La próxima cita de la Fórmula 1 será en el Gran Premio de México.
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